ESTADOS UNIDOS (Agencias).-El exjugador de la MLB Dustan Mohr fue condenado a nueve años de cárcel en Indiana tras declararse culpable de múltiples delitos sexuales contra una niña de 13 años.
Mohr fue acusado de manosear sexualmente a su víctima, a quien fue contratado para darle lecciones de softbol, varias veces durante un período de seis meses.
El hombre de 47 años jugó para los Mellizos de Minnesota, los Gigantes de San Francisco, los Rockies de Colorado, los Medias Rojas de Boston y los Devil Rays de Tampa Bay durante su carrera en el béisbol.
Según el medio de comunicación local WANE 15 , Mohr se quedó llorando en el tribunal y se disculpó con la víctima y su familia. Fue arrestado en agosto de 2023.
El juez del Tribunal Superior Fran Gull condenó a Mohr a cinco años por cada uno de los tres delitos graves: solicitación infantil para tener relaciones sexuales, seducción infantil y conducta sexual inapropiada con un menor.
La sentencia de 15 años fue parcialmente suspendida pero cumplirá tres años de prisión por cada cargo y el resto del tiempo en libertad condicional para adultos.
Los documentos judiciales muestran que Mohr fue contratado por la familia de la víctima para darle lecciones de softbol a su hija en el Centro de Entrenamiento Strike Zone en Fort Wayne. Sin embargo, él comenzó a ponerla en contra de su familia y a dañar gravemente su confianza.
Después de seis meses de entrenamiento, el padre de la víctima encontró a su hija en casa de Mohr.
Ella les dijo a los investigadores en múltiples entrevistas que Mohr la tocó de manera sexual durante sus sesiones de softbol y compartieron imágenes digitales privadas entre ellos.
También se dijo que Mohr la tocó de manera sexual mientras estaban en su vehículo e incluso le dio un teléfono nuevo para que pudieran estar en contacto.
El padre de la víctima también reveló ante el tribunal que Mohr logró desactivar el control parental de su teléfono. Dijo que pudo localizarla y rescatarla de una violación justo antes de cumplir 14 años.
También afirmó que Mohr le contó mentiras sobre él a su hija y le dijo que era «una persona horrible que abusaba mental y emocionalmente».
Mohr fue seleccionado por los Indios de Cleveland en 1997 y jugó en la MLB durante siete años. Al final de su carrera, Mohr jugó para la filial AAA de Colorado en 2008.
Llegó a Fort Wayne en 2009 para estar cerca de sus dos hijas y su madre.
Mohr se había ofrecido previamente como voluntario en Northrop High School como entrenador de primera base, pero solo permaneció una temporada.
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