República Dominicana.-El presidente de la Unión Demócrata Cristiana –UDC-, Luis Acosta Moreta, Luis “El Gallo”, pidió hoy que se inicie una fiscalización del comercio, para evitar que sean aumentados los precios de la comida y los servicios, ante la futura discusión de un reajuste de salarios de un 20 por ciento.
Aseguró que apenas si hay una propuesta de discusión hecha por el presidente Luis Abinader y los comerciantes, mayoristas y minoristas, están pensando en aumentar el valor de los artículos de primera necesidad.
“Con los precios actuales, ni siquiera ese 20 por ciento aseguraría que los más necesitados estarán en disposición de mejorar su nivel de vida, y llevar la comida a su mesa todos los días”.
Recordó que, “la historia dominicana referente a los reajustes salariales, es que antes de establecerse, ya los precios comienzan a ser aumentados en forma abusiva.
Pidió que se disponga control en los precios a que fijan los supermercados, los colmados, las pulperías y otros establecimientos que venden los productos de mayor consumo.
Vio positiva la iniciativa del presidente Abinader, y destacó que la misma debe contar con el apoyo de los empresarios y los sindicalistas. Hasta el momento los comerciantes han dicho que debe ser estudiada a fondo, antes de que se someta a discusión.
Los sindicalistas, por su parte, indicaron que el 20 por ciento no es suficiente para hacer frente a la inflación y propusieron un reajuste de un 30por ciento, diez por ciento más que lo planteado por el presidente Abinader.
“Debe quedar bien claro, dijo, que el reajuste del salario mínimo se llevaría a cabo para mejorar las condiciones de vida de los empleados y trabajadores dominicanos, y no para beneficio particular de los comerciantes”.
Por esta razón, la UDC propone que se vigile a los colmados y supermercados, para evitar que comiencen a subir los precios, antes de producirse cualquier reajuste salarial.
Resaltó que en numerosas ocasiones ha propuesto el “Macuto Económico Popular”, con un listado de productos de primera necesidad que se venderían a precios reducidos, y serían la garantía de que los pobres van a comer.