República Dominicana-Pese a que la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo ha sido reiterativo al afirmar que en estos últimos tres años se ha incrementado la capacidad de almacenamiento de agua, lo que permite brindar un servicio más eficiente a la población, la deficiencia en el suministro ya no es exclusiva de sectores marginados, sino que se extiende hasta zonas privilegiadas como los residenciales Sandra I y II, en Honduras del Norte, del Distrito Nacional.
El viernes santo pasado fue la última vez que el agua potable llegó a algunas casas de este residencial donde la poca presión con que se suministra impide que se distribuya de manera equitativa.
Con 18 días sin agua, es evidente la molestia de los aquí viven, quienes afirman que la CAASD les brinda el servicio cuando les parece y que solo alcanza para menos de la mitad de los hogares.
Los vecinos afirman ante la falta de agua debían pagar mil 500 pesos por un camión, precio que fue incrementado a mil 700 ante el aumento de la demanda.
Los residentes tanto en el residencial Sandra 1, como en el II afirman que de manera religiosa pagan cada mes la factura por un servicio que no reciben.
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