SANTO DOMINGO, RD.- A propósito del proyecto aprobado ayer por el senado en el que obliga a los vendedores informales a mostrar con letreros en sus puestos el contenido calórico en los alimentos, esto no ha sido acogido por este sector que dice no entender con qué fin aprueban dicha pieza.
Los vendedores de frituras, empanadas, pollo asado y otros puntos de venta informales consideran que colocar el grado en caloría de los alimentos aunque puede parecer una simple formalidad, es un tema que les resulta complicado, señalan que esta ley que aprueba el senado no es más que algo absurdo.
Algunos comerciantes ven esta decisión como una burla al sistema, considerando que las restricciones podrían afectar negativamente sus ingresos, señalando que es una medida innecesaria que solo busca llenar páginas.
Sin embargo, hay quienes entienden la importancia de informar a los consumidores sobre el contenido calórico de los alimentos que ofrecen por lo que sugieren que primero haya una educación para saber medir las calorías.
Entre las opiniones divergentes, algunos vendedores sugieren que antes de implementar estas normas, es crucial educar a la ciudadanía y a los propios vendedores sobre las implicaciones de una dieta poco saludable.
Argumentan que colocar letreros puede resultar efectivo solo si la población comprende la importancia de las calorías y cómo afectan su salud.
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